lunes, 27 de julio de 2015

Evangelio de San Mateo



05 Mateo
Por Arturo Pérez

Mateo ha sido llamado el “evangelio judío”, porque muestra particular interés en los asuntos de Israel. Más que ningún otro de los evangelios, tiene un gran énfasis en las profecías del Antiguo Testamento cumplidas en Jesucristo, quien es el Mesías esperado por los judíos.

Introducción acerca de los evangelios
Aunque dedicaremos más adelante un capítulo para hablar de los evangelios, para fines de contexto y mejor entendimiento queremos definir el término evangelio. La palabra evangelio viene del griego euaggelion (euangelion) que significa literalmente “buenas noticias” (eu es “bueno” y “angelos” es mensaje o noticia). La buena noticia comienza con la mala noticia de que somos pecadores, hemos sido hallados faltos ante Dios y debemos arrepentirnos de nuestros pecados porque estamos condenados. La buena noticia es que a pesar de esto, Dios ha hecho provisión y envió a su hijo en rescate por muchos, para que todo aquel que en El cree, no se pierda mas tenga vida eterna. Mateo dice que Jesús recorría todas las ciudades y aldeas, “enseñando en las sinagogas de los judíos, y predicando el evangelio del reino…” (Mat.4:23; 9:35). De hecho Marcos comienza su evangelio con esta misma palabra, diciendo “Principio del evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios” (Mr.1:1)

Los evangelios son más que simplemente biografías de Jesús. Contienen muy poco acerca de su niñez y sus primeros años, no dicen nada acerca de la adolescencia y juventud, y tienen muchos detalles de su última semana de vida en la tierra.

Durante 30 años después de que el Señor resucitó, los apóstoles declaraban las buenas nuevas acerca de Cristo por la predicación verbal. Mientras tanto se coleccionaban algunos escritos acerca de lo que Jesús dijo e hizo. Eventualmente todos estos escritos y el testimonio oral de la gente que lo vio y lo siguió sirvieron para componer en distintos contextos, lo que hoy conocemos como los cuatro evangelios.

Los evangelios constituyeron una buena fuente de respaldo para la predicación apostólica, y con el paso del tiempo fueron aún más indispensables ya que la gente que había testificado sobre estos hechos era cada vez menos por el paso del tiempo.

Cada evangelio tiene sus características que lo hacen diferente el uno del otro, lo cual será estudiado más adelante en otra lección. Mientras tanto debemos agradecer al Espíritu Santo por recordar a los autores las cosas que el Señor hizo y dijo (Juan 14:26) ya que entre los cuatro nos dan una visión comprensiva de Jesús, en lugar de tener una sola fuente, o en lugar de no tener ninguna. Imagínense qué triste sería que tuviéramos todo el Nuevo Testamento con la doctrina apostólica, pero sin saber cómo se cumplió en Jesús la promesa del Padre, y cómo predicó y sanó enfermos y cómo se sintió cuando habitó entre los hombres y cómo le crucificaron, etc., etc. Cada uno de estos retratos en los evangelios, tiene algo importante que aportar al todo. En esta ocasión, veamos el Evangelio según Mateo.

I. Tema central del Evangelio Según Mateo.



“Historia de Jesucristo como el Mesías y Rey esperado por Israel en quien se cumplen las profecías del Antiguo Testamento”. 

Es probable que Mateo haya sido colocado como el primer libro del Nuevo Testamento porque este evangelio sirve como un enlace perfecto entre el Antiguo y Nuevo Pacto.

En su narración, Mateo retrata a Jesús como el Mesías, el “ungido de Dios” de quien los profetas habían escrito. Por otra parte, Mateo tiene una estructura bastante clara y organizada que se enfoca en los temas centrales de la predicación de Jesucristo.

Un tema distintivo en este evangelio es “el reino de los cielos”, ya que los judíos esperaban al Cristo Reinante; Mateo narra las parábolas de Jesucristo aclarando estos “misterios del reino” donde se explica que el reino de los cielos era inaugurado inmediatamente con el ministerio del Señor, pero estaría en una etapa de siembra y luego el Señor volverá para la etapa de siega y el juicio final.

II. Autor, fecha en que fue escrito y tiempo que cubre.

El autor
El evangelio de Mateo no nos dice quién lo escribió. La tradición atribuye su autoría a Mateo o Leví y existen documentos de cristianos de principios del siglo II que decían que Mateo, un cobrador de impuestos (publicano) a quien Jesús llamó a ser apóstol, fue quien escribió este evangelio (Mateo 9:9-13; 10:3).

Prácticamente no se sabe nada acerca de él, exceptuando su nombre y ocupación. Después de la lista de apóstoles en Los Hechos (1:13) desaparece del escenario histórico de la iglesia salvo por algunas leyendas acerca de él.

Fecha de escritura y discusión sobre el idioma original
Sobre el momento cuando Mateo escribe o publica este evangelio no hay un consenso, pero es probable que debe ser entre el 65 d.C. y antes del 70 d.C. porque Mateo cita a Cristo profetizando la destrucción del templo de Jerusalén que ocurrió en el 70 d.C. y sin embargo no menciona en Mateo 24 que eso “ya se había cumplido”, o sea que tuvo que ser antes del 70 d.C.

Entre los documentos de los primeros escritores de la Iglesia (Eusebio para el 325DC cita a Papías del 100DC) se dice que Mateo había compuesto en aramaico (un tipo de hebreo) este evangelio y que luego se tradujo al griego. Ireneo declaró antes que Eusebio que Mateo publicó un evangelio escrito entre los hebreos, en su propio dialecto. Muchos piensan que si es cierto que Mateo escribió este evangelio en aramaico, que él mismo lo debió haber re-editado en la versión griega que hoy tenemos porque este evangelio tiene las características de haber sido escrito como original, no las de una traducción de un original arameo. Se han dado los siguientes argumentos para sostener que el evangelio no fue traducido sino escrito directamente en griego:
  • El autor usa mucho el texto de Marcos en griego en una porción considerable del libro.
  • Las citas que hacen Mateo, Marcos, y Lucas es de la Septuaginta (griego)
  • Las citas que únicamente Mateo menciona, son también de la Septuaginta (griego).
  • Existen ciertas construcciones gramaticales que dan a entender que las oraciones fueron construidas en griego, ya que cuando se traduce no se utilizan este tipo de construcciones tan peculiarmente griegas.

Tiempo que cubre
Mateo narra la vida del Señor Jesucristo desde su nacimiento (aproximadamente año 6 al 4 a.C.) hasta su muerte y resurrección (aproximadamente año 26 al 30 d.C.)

III. Destinatarios y propósito

Destinatario
Los evangelios no son como las cartas que especifican su destinatario. Pero es evidente que Mateo escribe su evangelio pensando en una audiencia netamente judía.

Propósito
El único evangelio que describe el propósito para el cual fue escrito es Juan. Mateo no tiene una declaración específica dando la razón de su narración, pero se ve claramente que él tiene en esencia el mismo propósito de los otros evangelistas, esto es, presentar de tal manera a Jesucristo y su obra de manera que sea posible que inconversos lo conozcan personalmente como Señor y Salvador.

En el caso de Mateo, sin embargo, se nota un énfasis en el cual él escribe para convencer a sus compañeros judíos de que Jesús es el Mesías, el Cristo, y por eso cita extensamente el Antiguo Testamento. De ahí que su importancia radica en cómo demuestra el cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento acerca del Mesías, en la persona de Jesús.


IV. Contenido

Capítulos
Descripción
1 – 2
Genealogía y nacimiento de Jesús
3
Juan el Bautista
4
Las tentaciones y el comienzo del ministerio de Jesús
5 – 7
El Sermón del Monte
8 – 16:12
Ministerio general, principalmente en Galilea
16:13 – 17:23
La confesión de Pedro y la Transfiguración
17:24 – 18:35
El ministerio final en Galilea
19 – 20
Jesús deja Galilea: el viaje a Jerusalén
21 – 27
La última semana de la vida del Salvador
28
La resurrección y la gran comisión
(Ver Anexo 1 si desea estudiar un bosquejo detallado de Mateo).

V. Resumen del libro

A. La preparación (1 – 4:11)

  • Incluye los relatos de infancia (1-2)
  • El ministerio de Juan (3:1-12)
  • El bautismo y la tentación de Jesús. (3:13 – 4:11)

En los primeros tres capítulos y medio Mateo presenta el significado del linaje humano de Jesús, ya que está escribiendo a judíos que rechazaron a Jesús como Mesías. La genealogía enumera los progenitores de Jesús hasta Abraham. Mateo quiere demostrar a sus lectores que “Jesús es el Hijo de David, y es hijo de Abraham, en otras palabras, el cumplimiento del pacto hecho a Abraham y a David.”
(Recordemos que el pacto hecho por Dios con su pueblo es esencialmente “yo seré a ellos por Dios y ellos serán mi pueblo”. Esa promesa vendría según la Escritura, de la simiente de Abraham, y de la casa de David. En el caso de David, la profecía habla de que el trono de David será eterno, haciendo clara alusión al trono que tendría el Mesías, como descendencia de David. Mateo demuestra por la genealogía, que Jesucristo viene de la tribu de Judá, de Booz y Ruth la moabita, que fueron los abuelos de David, y siguiendo más atrás, dice que es hijo o descendiente de Abraham. De hecho, Mateo relata mucho más adelante sobre la pregunta que el Señor le hace a los escribas y fariseos respecto a David? “Si el Mesías es hijo de David, por qué David le llama ‘Señor’?)

B. El ministerio en Galilea (4:12 – 18:35)

El ministerio público de Jesús comienza en Galilea predicando el arrepentimiento (Mat.4:12 – 17, ver Mapa)

  • Narra que Jesús utiliza Capernaum como centro de operaciones desde donde inicia su ministerio predicando el arrepentimiento. (4:12-25)
  • El Sermón del Monte (5 – 7). Aquí el Señor contrasta las leyes del Reino de Dios con las leyes interpretadas por los fariseos. Es importante aclarar que el Sermón del Monte no es un mapa que nos conduce a la salvación, sino que más bien es un espejo de un creyente, súbdito del Reino de los cielos.
  • Los capítulos 8 – 16 se concentran principalmente en el ministerio de Cristo en Galilea. El capítulo 13 contiene una parte importante de las parábolas del reino.
  • Del capítulo 17 al 18 tratan de la parte final del ministerio de Cristo en Galilea. Deja el norte y procede hacia el sur en su camino a Jerusalén y a la cruz.




C. El ministerio en Judea y Jerusalén (19:1 – 28:15)

  • En su camino a Jerusalén hacia el sur Cristo prepara el corazón de sus discípulos para lo que iba a suceder (20:17-19) especificando que sería crucificado.
  • Explica que su muerte aunque aparentemente trágica, es en realidad un acto de servicio y de vida eterna para muchos. (20:28).
  • El capítulo 21 presenta el inicio de la última semana de la vida terrenal del Señor Jesucristo con la entrada triunfal en Jerusalén, cumpliendo la profecía citada por Mateo de Zacarías 9:9.
  • Las enseñanzas de Jesucristo en esa última semana son fuertes y penetrantes y sus ayes en el capítulo 23:37-39 terminan con un lamento de profunda compasión.
  • Los capítulos restantes (26 – 28) tratan de la culminación de todas las profecías del Antiguo Testamento, para lo cual vino el Salvador. El tiene el control, y tiene poder sobre la muerte, la cual, no lo pudo retener en la tumba, y él resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras, para justificar a muchos llevando sus iniquidades.

D. La gran comisión (28:16-20)

El epílogo de Mateo concluye con la gran comisión que dejó el Señor luego de resucitar para que sus apóstoles fueran a todo el mundo predicando el evangelio, bautizando a los que creyeren y haciendo discípulos en todas las naciones, guardando todas sus palabras hasta que El vuelva.

VI. Peculiaridades

A. Palabras claves o ideas características

  • Mateo es el evangelio de la Iglesia. Es el único que menciona la Iglesia (16:18; 18:17).
  • Mateo es el evangelio del Reino. La enseñanza del REINO DE DIOS es dominante y el término utilizado es “el reino de los cielos”. La escatología ocupa un lugar destacado sobre todo en las parábolas y en el discurso de las últimas cosas (24-25; 28:20).
    • Sobre el Reino de Dios
1. El trasfondo de las parábolas de Mateo 13.
·         “Revelar los misterios del reino” Mateo 13:10-11.
·         Juan el Bautista. Mateo 3:1-12; 11:1-6
2. La enseñanza de Jesús: las dos etapas del reino de Dios.
·         El misterio: Dos etapas, una de siembra y otra de siega. Mat.12:24-30; 36-43
·         “Los justos y los injustos deben cohabitar en este mundo hasta el día del juicio”. v.30 “dejad crecer lo uno y lo otro hasta la siega”.
·         Mat. 13:1-9; 18-23: La parábola de los cuatro terrenos (sembrador) (siembra y siega)
·         Mat. 13:24-30 La parábola del Trigo y la Cizaña (siembra y siega)
·         Mat. 13:31-33 La Parábola de la Semilla de Mostaza y de la Levadura (crecimiento)
·         Mat.13:44-46 La Parábola del Tesoro y de la Perla (el reino es un tesoro escondido)
·         Mat.13:47-50 La parábola de la red (reunión y separación)

  • Mateo es el evangelio del Rey. La majestad real y la autoridad de Jesús el Cristo son declaradas (25:31-46; 28:18-20), así como su preeminencia sobre las instituciones de Israel:
    • El es mayor que la Ley (5:21-22, 27-28)
    • El es mayor que el sábado (Hijo del Hombre es mayor que el día de reposo) (12:8)
    • El es más que el templo (“os digo que uno mayor que el templo está aquí”) (12:6)
    • El es más que los profetas (“He aquí más que Jonás”) (12:41)
    • El es mas que el rey (“he aquí más que Salomón”) (12:42)
  • Mateo es el evangelio de los discursos. La enseñanza del Señor tiene una prominencia especial en este evangelio. Registra el contenido de varios discursos específicos de Jesús:
    • El Sermón del Monte (5:3 – 7:27)
    • Instrucciones a sus discípulos antes de su misión (10:5-42)
    • Parábolas del reino (13:3-52)
    • Las obligaciones del discipulado (18:3-35)
    • El discurso escatológico (24:4 – 25:46)
  • Mateo es el evangelio de los judíos. Es el más interesado en citar el cumplimiento de las profecías del AT.

Mateo escribió de manera peculiar pensando en los judíos, y por eso cita el Antiguo Testamento 53 veces, comparado con 36 de Marcos, 25 de Lucas, y 20 de Juan.
La frase que leemos en Mateo 1:22 “Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta” se repite muchas veces en la medida que él trata de convencer a los judíos, que estaban muy familiarizados con el Antiguo Testamento, de que Jesús era el cumplimiento de las antiguas profecías.

Es interesante el rol que jugó la Septuaginta, la traducción del Antiguo Testamento hebreo hacia el griego (traducida del 285 al 246 a.C. durante el reinado de los griegos ptolomeos), ya que a pesar de ser una copia traducida, fue la más utilizada por los autores del Nuevo Testamento para citar la Escritura del Antiguo. Aún el Señor Jesucristo cita mucho la Septuaginta. Mateo citó algunos pasajes de los textos hebreos, pero la mayoría de citas es de la Septuaginta.

  • Una palabra muy repetida en este evangelio es la palabra “Padre”. Jesús habla repetidamente de Dios como Padre.


B. Grandes eventos

  • Nacimiento de Jesús (1)
  • Bautismo de Jesús (3)
  • La tentación de Jesús (4)
  • La transfiguración (17)
  • La entrada de Jesús a Jerusalén (21)
  • Juicio y crucifixión (26-27)
  • Resurrección de Jesús (28)

C. Pasajes famosos

  • El Sermón del Monte (5-7)
    • Las bienaventuranzas (5:3-12)
    • Ama a tus enemigos (5:43-48)
    • La oración del Señor (6:9-13)
    • Primero lo primero (6:25-34)
    • Pedir, buscar, llamar (7:7-11)
    • La puerta estrecha (7:13-14)
    • No todo el que me dice “Señor, Señor” (7:21-23)
    • Las dos casas (7:24-27)
  • “Venid a mí y descansad” (11:28-30)
  • Las parábolas del reino de Dios (13)
    • La parábola del sembrador (13)
  • La gran declaración de Pedro (16:13-19)
  • Predicción sobre destrucción Jerusalén (24)
  • La parábola de las vírgenes (25)
  • La parábola del juicio final (25:31-46)
  • La gran comisión (28:16-20)

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